Cada 25 de mayo, el corazón de la Madre África late con más fuerza. Es el Día de África, una fecha que para muchos pasa desapercibida, pero que en la comunidad Rastafari vibra con profunda significación. Esta celebración no es solo una conmemoración histórica: es un acto de identidad, resistencia y conexión espiritual.
¿Desde cuándo se celebra el Día de África?
El Día de África nace oficialmente el 25 de mayo de 1963, cuando 32 países africanos firmaron la carta fundacional de la Organización para la Unidad Africana (OUA), hoy conocida como la Unión Africana. Este fue un momento clave en el proceso de descolonización del continente, uniendo naciones recién liberadas con un sueño común: la emancipación total de África y su gente.
¿Por qué es importante esta fecha para la cultura Rastafari?
La espiritualidad Rastafari está profundamente enraizada en la liberación africana. S.M.I. Haile Selassie I, fue uno de los protagonistas más influyentes en la fundación de la OUA.
Su liderazgo no solo inspiró a los jefes de Estado africanos, sino que también cumplió las visiones de Marcus Garvey, quien predicaba la vuelta a África y la redención de su pueblo.
«La unidad de África no es un sueño, es una necesidad» — S.M.I. Haile Selassie I
Para Rastafari, el 25 de mayo no es un símbolo político, es un día espiritual. Se honra la resistencia de nuestros ancestros, se medita en la importancia del conocimiento de nuestras raíces, y se renueva el compromiso con los principios de amor, justicia y verdad que el Emperador S.M.I. Haile Selassie I enseñó.
¿Cómo se celebra el Día de África desde la mirada Rastafari?
En las comunidades Rastafari de América Latina y el Caribe, este día se vive con fuego en el alma y tambores en el corazón:
- Nyabinghi: Sesiones de tambor y canto sagrado en honor a los ancestros.
- Lecturas de discursos: de S.M.I. Haile Selassie I y Marcus Garvey, reconectando con la palabra y la visión.
- Compartires comunitarios: con alimentos I-tal, bendecidos en amor y hermandad.
- Arte, poesía, y música reggae consciente: porque la cultura es resistencia viva.
- Ceremonias de oración y meditación: reafirmando la conexión con la Madre África.
En pueblos como Esmeraldas (Ecuador), San Basilio de Palenque (Colombia), o Puerto Limón (Costa Rica), donde habita la diáspora afrodescendiente, esta fecha también resuena. Aunque no siempre se celebra oficialmente, la conciencia negra se despierta a través de la danza, la palabra y la memoria oral. Los Rastafari en estas regiones han sido puentes culturales, portadores de una visión espiritual que une al África ancestral con la lucha cotidiana de los pueblos afro en América Latina.
Más allá de la fecha: ¿Qué nos recuerda este día?
El Día de África no es solo sobre África. Es sobre nosotros. Sobre los orígenes, la identidad robada y la necesidad de reconstruir.
Nos recuerda que la espiritualidad Rastafari no es una moda, es una forma de vida guiada por valores eternos: libertad, dignidad, repatriación y amor universal. Celebrar el 25 de mayo es levantar la voz por la justicia, por la historia real, y por ese futuro que África ha soñado bajo las cadenas de los colonos.
Cierra los ojos por un momento…y escucha el tambor que late desde Etiopía hasta tu pecho.
Ese sonido te llama. Es el eco de tus raíces, es África hablándote.











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